19th

mayo
19 mayo, 2025

LA REFORMA JUDICIAL Y LA GENERACIÓN IDIOTA

Estamos a escasos días de la consumación de una “reforma Judicial” que terminará de estallar como un volcán sobre nuestro estado de derecho y libertades destruyendo como lava hirviente reptando inmisericorde por las laderas de nuestras leyes y avasallando a una población inerme, en esa tierra de los volcanes descritos magistralmente por el Dr. Atl y lo hará como aquella Crónica de una Muerte Anunciada de García Márquez, ¿será acaso el epíteto de una gran nación que sucumbe a la mentira, el robo y la traición que hace siete años nos declararon con una sicología inversa que no todos entendieron?

El legado de un hombrecillo de poca talla que quiso compararse con Juárez y hasta con el Verbo Encarnado sin darse cuenta del tamaño de su blasfemia, henchido de poder, alcanzado éste con un cinismo supremo como ningún político mexicano anterior lo hubiera siquiera intentado, ni Carranza, ni Salinas ni el mismo Juárez.

Es tal el tamaño de la destrucción que además de aniquilar el sistema de salud, la procuración de servicios, la generación de empleos, el ahorro de 18 años para contingencias, el robo descarado y desmedido de la mayor parte del presupuesto, la quiebra de Pemex, mucho atribuida al huachicol  fiscal, el nulo crecimiento en generación de energía eléctrica el huachicol eléctrico que ha derivado en apagones como no se veían y al deterioro de la CFE, una delincuencia de crecimiento mundial exportada por la abierta sociedad de éste gobierno y la entrega de la soberanía para que hagan lo que gusten, a sus anchas, sin aplicar la ley como manda nuestra Constitución. Pero, esta barbarie no ha sido suficiente para alimentar ese narcisismo exacerbado, se requiere todo el poder, ¡todo, completo, total! Es necesario el escarnio, la exhibición del poder alcanzado el control absoluto: el legislativo ya está en la bolsa; el Judicial, aun respira débilmente, urge colocar a los incondicionales que garanticen la continuidad de los negocios a costa de lo que sea, así sean igual de miserables y rufianes que quien los protege y los propone.

¡La República ha muerto! ya no existe y todo ha sucedido ante la pasividad cómplice de una generación más que tibia, inerte, aplaudidora, idiota, que todavía pregunta si es o no conveniente participar.

Aquella que no reaccionó ante el fraude monumental de las pasadas elecciones, ante la toma del senado con una sobre representación inventada, robada a base de vender su alma, al despojo de fideicomisos y el robo histórico disfrazado con dádivas miserables que envilecen a quien las recibe.

Aún es tiempo de dinamitar el circo que se avecina, hacerlo con dignidad y valentía, si todavía queda un asomo de orgullo por la que fue una Patria pujante. ¿Quieres votar?, ¡hazlo! ¿quieres expresarte? ¡hazlo!, ¿quieres exhibirlos?, ¡hazlo! cualquier cosa es valiosa menos apoltronarte cómodamente en un sillón esperando que venga un adalid a hacer lo que debes mientras disfrutas de un buen trago. ¡Faltaba más!

Tu razón y convicciones te guiarán en el camino y suerte a tus futuras generaciones, El Flautista de Hamelin está muy ocupado.