Los mamuts que ven mis ojos
Por Leopoldo González
Si se equiparan Morena y la 4T con un zoológico, ese zoológico sería prehistórico y abundarían los paquidermos y mamuts, esos animales que son de otro tiempo, pero cuya gracia seguimos apreciando por el manejo profesional de la imagen.
En cambio, si se equiparan Morena y la 4T con un navío marítimo, serían ni más ni menos que el Titánic de la política nacional: un barco a la deriva con los ojos del océano mordiéndole la vida y los del hades postdiluviano masticándole la muerte.
Ambas imágenes no son gratuitas. Están extraídas del mamut cancelado en el logotipo del Aeropuerto Felipe Ángeles, pero también de otros vertebrados y anfibios que pastan en la gran viña del señor del Zócalo.
Aunque el proceso de toma de conciencia en el país ha sido lento, cada día crece más el sentimiento de que Morena ha extraviado el rumbo.
La percepción de que Morena ha traicionado los principios y valores con que nació es generalizada, pero abarca a morenistas que aún siguen ahí y a exmorenistas que abandonaron la causa para irse al PES, a Movimiento Ciudadano, a RSP o a FxM.
La decepción que cunde en Morena, creciente y de efecto multiplicador, está relacionada con las candidaturas de crápulas e impresentables en todo el país, pero también con acciones del gobierno de la 4T que no convencen y se apartan de lo que es, en un sentido estricto, el Estado Democrático de Derecho.
La suspensión, primero provisional y luego definitiva, que concedió el juez federal Juan Pablo Gómez Fierro respecto a la reforma eléctrica morenista, dividió a ese partido que había ofrecido ser distinto a todos los demás.
La confrontación del presidente de la República con el Instituto Nacional Electoral (INE), por la negativa de registro a 59 candidatos de Morena en el país, incluidos el astado “sin cerca” de Guerrero y el agitador venido a menos de Michoacán, generó decepción en la opinión pública y morenista por la falta de objetividad y la prepotencia presidencial, pero también porque Morena cree que violar la ley es una “gracia” que debe reírsele a mandíbula batiente.
Después de la resolución jurídico-administrativa del INE vino la “resolución definitiva de cosa juzgada” del Tribunal Electoral y luego otra vez la del INE. Y aquí, una vez más, por las presiones autoritarias que van del Zócalo al Tribunal, ha podido verse que el titular del Ejecutivo no quiere una cancha pareja para todos, sino una cancha con ventajas desmedidas para sus incondicionales.
El asunto de la reforma al Poder Judicial, que en una democracia con dignidad y decoro sería visto con otros ojos, ha pasado a ser un asunto secundario ante el hecho de que, por un “agandalle” de la bancada de Morena en el Senado, se quiere extender por dos años más -inconstitucionalmente- la permanencia del actual presidente de la Corte, Arturo Saldívar Lelo de Larrea.
Aquí no hay gato sino toda una jauría de mininos encerrada, porque pretender hacer del presidente de la Corte (artículo 13 transitorio) un criado al servicio del Ejecutivo, y del pleno de ministros una ventanilla de trámite del capricho y el pálpito presidencial, viola la constitución, atropella el principio de supremacía constitucional, violenta el principio de división de poderes, vulnera la democracia y podría conducir a la disolución del régimen republicano de gobierno.
Todo esto, que ha ocurrido en menos de un mes y medio, ha retratado a Morena y a la 4T como lo que realmente son: una pandilla de asalto al poder que prefigura la dictadura populista que quiere imponerse a nuestra sociedad.
Desde luego, los fanáticos no tienen criterio para justipreciar razones y verdades distintas a las suyas, entre otras cosas, porque la ceguera de sus creencias unifocales se los impide. Sin embargo, de esto también ha tomado nota el morenismo inteligente que hay en el país.
A la hora en que escribía estos renglones, el juez Juan Pablo Gómez Fierro ha vuelto a ser noticia, pues luego de que hace semanas concedió los primeros amparos contra la reforma eléctrica de AMLO, ahora otorga la primera suspensión provisional contra el Padrón de Datos Biométricos de Telefonía Móvil que impulsa Morena, porque ese instrumento podría no ser útil para la persecución del delito, pero a cambio vulneraría el derecho humano a la privacidad y a la reserva de los datos personales de los mexicanos.
Es decir que, en síntesis, la mayoría de los conflictos y problemas que ha provocado Morena como partido gobernante -documentados por la prensa- se refiere a la inobservancia o al desacato de su gente a los principios del régimen constitucional.
Por estas y otras razones, algunos muy cerca y otros lejos de Santa Lucía, comienzan a creer que últimamente llueven mamuts y paquidermos en la hondonada metafísica del bajo Valle de Anáhuac.
Pisapapeles
En el Museo de Antropología y Ciencias Naturales de la ciudad de Berna, en Suiza, se lee en el bajopedestal del Dinosaurio que preside la sala: “Extinguido: demasiada coraza, poco cerebro”.
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